En otra ocasión ya hemos hablado de los inicios de la red telefónica de Toledo, pero hoy transcribimos un curioso artículo por su rareza, pues es de los pocos que describen detalladamente una central desde las páginas de un periódico destinado al público en general.
A principios de 1914, la Compañía Peninsular de Teléfonos se hizo cargo de la Red Telefónica Urbana de Toledo trasladando la central telefónica a la calle de la Plata nº 20. El 1 de noviembre del mismo año el Diario Toledano se hacía eco de un aparatoso incendio en el tejado de la propiedad de Manuel Nevot, conocido con el nombre de “El Valenciano”. El suceso dio lugar a una serie de llamadas a la central telefónica que, al parecer, originaron algún comentario que no fue del agrado de los usuarios como, por ejemplo, «El fuego nos va a dar esta noche la cena…».
El mismo diario publicaba el siguiente día 6 los resultados de una “visita de investigación” para informarse del funcionamiento del servicio.
En la Central.
Después de hablar con el jefe sin exponerle nuestra condición de periodistas solicitando su permiso para recorrer las dependencias, este señor nos dio atentamente toda clase de facilidades y puso a nuestra disposición un dependiente que nos sirviera de guía.
Comprenderán nuestros lectores, el principal objetivo de nuestra visita era ver cómo se extendía el servicio del público y los abonados por las señoritas telefonistas encargadas de él, y de ahí el que nosotros ocultásemos nuestra profesión periodística, que en aquel momento tenía una alta misión finalizadora.
En la sala de comunicaciones. El servicio de las señoritas telefonistas.
Fuimos presentados a la Srta. Amelia Ruiz, encargada del personal femenino, quien nos explicó pródigamente y con una amabilidad exquisita todas las condiciones en que se efectúa el servicio, como asimismo el mecanismo complicadísimo del receptor y distribuidor de las comunicaciones entre los abonados y la central, y de ésta, a los abonados y a un gran número de pueblos de la provincia y a la mayor parte de las poblaciones más importantes de España.

Telefonista con su equipo de auriculares y microplaston. Fuente: Archivo Fotográfico Fundación Telefónica.
Atadas verdaderamente a los aparatos por uno que las sujeta al asiento imposibilitándolas de abandonar su puesto, prestan el servicio las señoritas telefonistas, que, además, tienen una férrea diadema en cuyos extremos tiene: en uno, un botón opresor, y al otro, el auricular, completando este mecanismo el aparato de emisión (micrófono), que, sujeto por unos cordones transmisores, va a colocarse sobre el pecho, permitiendo por esta hábil disposición hacer uso de las dos manos para poner y quitar las comunicaciones, que son por señorita ciento veinte.
El servicio de timbre para anuncio de comunicación, está desterrado, usándose en su sustitución, unas bombillitas microscópicas colocadas sobre el número de abonado que solicita comunicación y las que se encienden en el momento en que se va a hacer uso de la misma.
La telefonista, para esto, no tiene que moverse de su puesto, desde donde, recogiendo por medio del micrófono la comunicación, la transmite al abonado que se ha anunciado. Esta operación es rapidísima, que se tarda escasamente medio minuto.
Tan incompletísima explicación hará comprender a nuestros lectores que las señoritas telefonistas están impedidas de hacer otra cosa que atender a su misión.
Las estrellas de la Central.
Estas reclusas inmovilizadas, que son las encargadas de facilitar la comunicación de intereses, afectos e ideas, forman una pléyade de verdaderas estrellas, que irradian belleza, pues está formada esta constelación por la señorita Amelia Ruiz, como estrella de primera magnitud y por las encantadoras Srtas. Ascensión Lozano, Conchita Palacios, María Vera, María Gómez de Nicolás, Enriqueta González y Herminia Gómez de Nicolás.
Supernumerarios: Las Srtas. Sofía Pérez, Martina Rodríguez y Luz Garcés.
Explicaciones a nuestra queja. Visitando la instalación urbana.
Ya en el departamento citado, hicimos constar cortés pero firmemente nuestra protesta por lo que, con motivo del incendio, consignamos en nuestro número del pasado jueves, a lo que nos contestaron dándonos la seguridad de que ellas no dijeron la frase que aludimos en nuestra protesta, y de que será muy difícil que pueda repetirse otra de esta naturaleza, pues ya empieza a normalizarse el servicio por estar terminada la total instalación de la Central pues hasta ahora, se ha estado sirviendo al público, al mismo tiempo que se trabajaba.
Nos indicaron también, que la causa principal de los retardos en las comunicaciones, se debe la mayor parte a los abonados, que en muchos casos, la mayoría, en vez de dar el número del que desea comunicar, dan el apodo, a veces el nombre solo y otros los apellidos, teniendo las telefonistas que averiguar quien es el individuo, y otras buscarlo por medio de listas.
Nos dijeron también que no cumplen las observaciones que para el uso de los aparatos da la lista de abonados.
Estas consideraciones nos rogaron fueran transmitidas a los lectores, para que comprendieran que los abonados son culpables de muchos descuidos.
Se lo prometimos y continuamos visitando este establecimiento tan importante por la índole de su cometido.
Acompañados de la Srta. Ruiz y el mecánico de la Central D. Félix Balairón, visitamos la instalación de comunicaciones urbanas, de la que nos dio una admirable explicación este señor, quedándonos convencidos de los admirables aparatos sistema Múltiple, de la casa Bell de Amberes, último adelanto de la mecánica telefónica.
A continuación nos enseñaron la habitación destinada para que las señoritas guarden sus prendas y demás efectos. Esta pieza, decorada con gusto exquisito y con gran confort, nos demostró el celo y cariño que siente por sus subordinadas la Srta. Ruiz, a quienes trata como compañeras.
Acumuladores Tudor y motor para los mismos.
En una pieza contigua a la de comunicaciones urbanas, se hallan los acumuladores sistema Tudor, para la alimentación de las bombillitas que sustituyen los timbres. Es un modelo de perfección mecánica.
Más dentro se encuentra un motor para carga de los acumuladores. Es precioso, y está montado tan admirablemente, que ni el ruido y la trepidación se siente lo más mínimo.
Damos desde estas columnas muchas gracias a la Srta. Ruiz y al Sr. Balairón, por sus atenciones que con nosotros tuvo.
La Administración.
Ésta se halla al cargo del jefe don Manuel Génover y D. Leopoldo López, empleados que proceden de la antigua Central.
Esta dependencia es la última palabra de la comodidad en Oficinas.
Servicio interurbano.
Este servicio de grandísima importancia, se encuentra a cargo de los señores Semper, jefe; D. Vicente Yorca y D. Antonio Gamero, recaudadores.
Los aparatos de instalación interurbana.
Los destinados a este servicio y su instalación son lo más moderno y perfeccionado que existe en el mundo en el momento actual. Proceden de la casa Art. Ges. & Generts- Berlín [sic], y ponen en comunicación a más de cien poblaciones españolas, importantes por su comercio, industria y movimiento. El número de ellos nos impide (como hubiera sido nuestro gusto) el publicarlos para conocimiento de nuestros lectores.

Centralita tipo Mix & Genest- Berlín. Fuente: Catálogo Mix&Genest.
Sala del público.
Preciosa en extremo es esta dependencia, donde se encuentran los pupitres donde el público extiende los telefonemas para los puntos donde se deseen las conferencias telefónicas.
También es al mismo tiempo recibimiento y espera.
Locutorios.
En los departamentos destinados a este fin es donde la Compañía Peninsular de Teléfonos ha derrochado su buen gusto y elegancia. Son de doble puerta, y en su interior puede hablarse con la seguridad de que las palabras del conferenciante no serán oídas por el que se encuentra en la inmediata estancia.
Los muros de reparación de estos locutorios están construidos con el objeto de que no se perciba la más leve palabra.
Sus paredes están tapizadas de riquísima pana y sus aparatos de comunicación permiten que el conferenciante tenga libres las manos si se desea escribir.
Como aclaración a los comentarios del periodista sobre los equipos, queremos añadir que el «sistema Múltiple, de la casa Bell de Amberes«, se refiere a unas líneas que se multiplaban a todas las posicines para poder enlazar las comunicaciones entre ellas. Cuando se refiere a la casa «Art. Ges. & Generts- Berlín«, con toda seguridad se refiere Aktiengesellschaft (Sociedad Anónima) Mix&Genest de Berlin-Schöneberg.
Documentación.
Diario Toledano, disponible en la web de Prensa Histórica del Ministerio de Cultura.
Archivo Fotográfico Fundación Telefónica.
Arxiu Històric de la ciutad de Barcelona.
Catálogo Gruben Signal und Telephonanlagen de Aktiengesellschaft Mix&Genest Berlin-Schöneberg.
Buenos días, encuentro muy interesante su blog, yo trabaje durante más de 10 años como oficial de 1ª uniendo cables, lo que se llamaba empalmador de líneas telefónicas. Todavía tengo un manual con las instrucciones , lo tengo escaneado y lo pongo a su disposición si le interesa. Un saludo y siga trabajando con ese entusiasmo.
Gracias Alfonso, toda documentación es bienvenida. te enviaremos un correo para ultimar detalles. Un saludo.